15 d’abril del 2020

Un elogi a l'Àngel Grané (20-10-1906)

Diario de Tenerife, Año XX, núm.5996, 20 d'octubre de 1906, pàgina 2.

"GLORIAS DE ESPAÑA
Angel Grané
No es pintor como Zuloaga y Sorolla, no es músico como Sarasate; no es dramaturgo como Echegaray, no es científico como Cajal, ni novelista como Galdós y Blasco Ibáñéz, ni bailarín si quiera como la Otero. Es menos que eso y es más que eso.
Angel Grané es un modesto obrero tejedor, de veintiún años, que honra a España, que da gloria á España, que hace que el nombre español se repita en fábricas, talleres y hogares de Francia, de Inglaterra, de Alemania, de Bélgica.
Su fisonomía tiene los rasgos de los grandes vencedores: angulosa en los pómulos, denotando la voluntad; tersa en la frente, denotando la inteligencia; carnosa en la nariz, abierta y móvil, denotando las voluptuosidades del trabajo y la glorai; fina en la boca, denotando la terquedad; resplandeciente en la mirada, denotando el genio.
Grané es hijo de Cataluña; es el hijo de que habló [Ventura] Ruiz Aguilera en su famosa poesía [Balada de Cataluña, de 1868], digna de compararse con la célebre Campana, de Schiller.
Cataluña tiene un hijo,
tiene un hijo menestral...
Ese es Grané.
Nació en Navarclés, de la provincia de Barcelona, y empezó el oficio de tejedor en modesta fábrica de su pueblo. Tres meses de iniciación, y en seguida busca más ambiente y se va á Manresa á trabajar en la fábrica de Bertrán é Hijo. Allí practica en el telar y teoriza en la Escuela de Artes y Oficios. En ésta obtiene, en la clase de «teoría y práctica de tejidos» la nota de sobresaliente, y en las oposiciones de fin de curso gana el primer premio. Ha oido hablar de una Escuela que hay en Francia que es como la Sorbona de los conocimientos textiles, en donde ha visto que á la Escuela Nacional de Artes industriales de Roubaix se la conoce en todo el mundo con la denominación de Universidad Textil francesa, y que a ella concurren alumnos de Alemania, de Bélgica, de Inglaterra, de todas las naciones.
Hay que ir allí á aprender, á triunfar, á hacerse hombre y á hacerse célebre.
Solicita como alumno teórico de la Escuela de Artes y Oficios de Manresa, una pensión de las que en hora felicísima creó para obreros el ministro de Fomento D. Rafael Gasset.
Grané parte para el extranjero el 23 de mayo de 1905 formando en la quinta expedición obrera que marchó a las órdenes del ingeniero jefe de los obreros en Francia, D. Enrique Sanchís.
Este, que á otras muchas condiciones une la de tener perspicacia suma, ve en seguida en Grané al obrero que con otros varios ha de honrar la expedición, y sospecha que el mozalbete imberbe puede llegar á ser una gloria para España. Sauchís forma su plan; aconseja a Grané que se dedique ante todo al estudio del francés, y luego que el obrero, al poco tiempo, ha vencido las dificultades del idioma, el ingeniero jefe se lanza á la dificilísima tarea de lograr que ingrese Angel Grané en la Escuela Nacional de Artes Industriales de Roubaix.   
Grané entra en la Escuela por autorización especial del ministro de Instrucción pública de Francia. Es un triunfo de Sanchis, que engendra todos los triunfos del hijo de Cataluña; todas las glorias que recaen en España, todos los aplausos que resuenan enderredor de la idea bienhechora de un joven ministro de Fomento y de aquellos sus sucesores que la mantuvieron y desarrollaron.
La entrada de Angel Grané en la Universidad Textil Francesa es entrada triunfal y redentora; en el primer Concurso trimestral de la Escuela gana el número 2 el obrero español; en el segundo y tercer Concursos trimestrales se pone á la cabeza de todos los alumnos: gana el número 1. En los exámenes de fin de curso le dan el primer premio.
En el curso de 1905-906 obtiene el número 1 en todos los cursos trimestrales: obtiene el número 1 en Contextura y Análisis; obtiene el número 1 en Composición de dibujos y tejidos; se le clasifica el primero de la Escuela Nacional de Artes Industriales francesa, y la Cámara de Comercio de Roubaix, uno de los más potentes organismos del mundo, le concede la medalla de oro.
¿Se quiere mayor gloria? Pues hay más. Se celebra en Tourcoing, centro industrial y poderoso del Norte de Francia, una Exposición internacional de industrias textiles. La Escuela de Roubaix concurre á ella; pero la Administración de dicha Escuela teme ser vencida por los tejedores de Armentiers, de universal renombre... Ante tales temores, la primera Escuela de Francia, que es primera en Europa, se fija en su primer alumuo, en Angel Grané y le obliga á presentar dos tejidos que en la propia Escuela había ejecutado con destino a la Exposición obrera de Madrid, para presentarlos en la Exposición In ternacioual de Tourcoing.
La Escuela Nacional de Artes Industriales francesa está salvada. La ha salvado ese muchacho de veintiún años. ¿Quién es? ¡Es un español y sus triunfos, triunfos son de España!
(Diario Universal)."